Convivencia, música, naturaleza, música, alegría, música, intercambio y música, música, música…

GiraTamborConvivencia16- 52

Una vez instalados en Barría (Gasteiz) comienza una rutina de trabajo, música y convivencia, que es realmente el “porqué” de toda esta historia. Lo de rutina se refiere a la estricta organización, porque para ninguno de los que estamos aquí, lo es.

Hay un ambiente excepcional y en cada minuto hay miradas, risas, tensión musical, intercambio de experiencias…

El trabajo con los directores, muy profesional y duro, pero todos sabemos a lo que hemos venido y nuestros chavales lo están dando todo. Solo ponen “mala cara” cuando tienen hambre y eso se soluciona fácilmente.

Los momentos de descanso se respetan, pero son 8 horas diarias de ensayos en el Conservatorio Jesús Guridi. Iker es muy perfeccionista y exigente y sabe sacar a cada uno lo que lleva dentro. Ha dejado en manos de Iván y Unai la parte de percusión y sabe que están preparados (un problema menos). Ayer al terminar la jornada, estaba muy contento… hay muy buen ambiente y eso augura exitazo.

Traslado a Barría y tras la cena la ANIDAN-BLOKO DEL VALLE Juniors Band se cuelga los tambores. Noche de luna llena y fresquita hasta que empiezan los primeros compases… todos, todos los músicos, monitores y trabajadores moviéndose bajo la batuta de Unai. Hay magia. Hay comunicación, ritmo, integración… nuestros chavales con una inmensa sonrisa dándolo todo al ver que eran capaces de mover todo lo movible. Otro momento inolvidable.

Jayone, una de las monitoras nos dice que no sabemos lo que estamos haciendo, con los chicos de aquí. Siempre serios, ensimismados, poco comunicativos, hasta que llegaron los tambores y sus portadores llenos de alegría, sonrisas, avidez de conocer y un inmenso corazón abierto para todo aquel que quiera acercarse a ellos.

Un último detalle: Ayer fueron los últimos en llegar a desayunar… hoy han sido los primeros. ¿No os importa si os decimos que los queremos a morir?