Segundo dia del Lamu Cultural Festival

Todos al barco, y a tocar… tres horas de percusión recorriendo un frente marítimo repleto ojos blancos rodeados de pieles más o menos oscuras que no se quieren perder nada de lo que sucede a su alrededor… y aunque el calor aprieta, nadie se queda quieto. Es curioso destacarlo, porque habitualmente no son muy expresivos, pero durante el Festival, se transforman.
Nuestros niños y niñas disfrutan como locos, ríen, cantan, bailan (un poco, porque no hay mucho espacio) y rezuman felicidad por todos los poros de la piel. Al terminar, Kate nos invita a todos a un zumo en su espectacular casa, que es como un museo de sus vivencias a lo largo y ancho del planeta Tierra…
Ya de noche, se guardan todos los instrumentos en casa de Ugo & Claudia y a descansar… estamos rotos, pero muy felices… el equipo funciona de maravilla y, de momento, no hay bajas…